Aprovecha al máximo tu tiempo

Me llamo Santiago Tovar. De pequeño me gustaba mucho jugar al fútbol, al baloncesto y al tenis. Con un libro delante lo pasaba peor, me pasaba horas mirando la misma página sin enterarme de nada de lo que leía. Para recordar algo utilizaba el método del loro, que consiste en leer la misma página durante infinidad de veces, es un método muy ineficaz que requiere de mucho tiempo para recordar algo tan solo unos días. Me decían que me distraía con una mosca y que me concentrase, es como decirle a un delfín que se suba a un árbol. ¿¿CÓMO LO HAGO??

Después de terminar el colegio considerándome a mí mismo un mal estudiante, llegó ingeniería industrial. Los problemas crecieron, no recordaba prácticamente nada de lo que había visto en el colegio. Intentaba memorizar como hacer los ejercicios, pero todo lo que había estudiado desaparecía de mi cabeza a los pocos días, mi sentimiento de frustración creció, ¿acaso no era lo suficientemente bueno? Algunos años después conseguí terminar.

Es la hora de ponerse a trabajar, ya no habrá más problemas de concentración ni tendré que memorizar apuntes. ERROR. En las reuniones de trabajo hay que prestar atención, hay que recordar las tareas pendientes e infinidad de cosas más. Yo no era capaz de hacer nada de esto, te puedes imaginar la idea que tenían mis superiores de mí.

Cuando decidí tomar acción

Por fin llego el día en el que hice algo. Siempre había tenido la sospecha de que había algo que me impedía concentrarme, por lo que decidí ir al psiquiatra. Me confirmó que tengo trastorno de déficit de la atención (TDA) y que lo he tenido desde pequeño. Me puso un tratamiento con el que a los pocos días empecé a notar un cambio en mi capacidad de concentración, recordaba más cosas, parecía increíble, pero el progreso se estancó. Ahora que empezaba a ver la luz quería más.

A finales de 2018, empecé a informarme más en profundidad de todo lo referente a las capacidades mentales. Compré varios cursos de memorización, estilo de vida y concentración, leí muchos libros y blogs acerca de estos temas, fui poniendo en práctica todo aquello que iba aprendiendo. Modificar mi alimentación, incluir más rutinas saludables para mejorar la neuroplasticidad y la neurogénesis (la creación de nuevos enlaces neuronales y la creación de nuevas neuronas respectivamente), aplicar técnicas de memorización como por ejemplo el palacio de la memoria y muchos más cambios en mi vida.

Los resultados de tomar acción

Unos meses más tarde repasé mentalmente todas las tareas que había pendientes en el trabajo, parece poca cosa, pero fue en ese preciso instante cuando me di cuenta de que algo había cambiado en mi cabeza, acababa de recordar las 15 tareas pendientes en tan solo un instante, sin tener que darle vueltas a algo que sabes que falta pero que no recuerdas que es. Me encontraba genial, continué con mis rutinas de ejercicios, alimentación, lectura, meditación y el resto de hábitos saludables durante varios meses. Fue entonces cuando empecé a dejar de lado estos hábitos y volver un poco a mi vida anterior, pensaba que el progreso se estancaría y ya está. Pero no, no solo se estancó, si no que empecé a recorrer el camino hacia atrás: volvieron los olvidos, los problemas para dormir, cogí peso, no me concentraba como antes… No quedaba otra que volver al camino de la mejora constante o kaizen, como lo llaman los japoneses.

Cómo puedes conseguir tus objetivos

Y esta historia ha llegado al presente, a Brain Fit Power, mi proyecto para enseñarte una metodología con la que tus problemas para concentrarte o memorizar se irán muy lejos de ti.

No te conformes con menos de lo que desees, recibe un enorme saludo y nos vemos muy pronto.